SORPRENDIDO POR TU HIJO HACIENDO EL AMOR
Aunque es una situación que no todos los padres hemos experimentado, sí es algo a lo que todos le tenemos miedo...
Si tu hijo te sorprende haciendo el amor, quizás lo primero que te preguntes es si has dejado marcas en su conciencia para toda la vida. ¡Por supuesto que no! Pero, dependiendo de la edad de tu hijo, es posible que tengas que dar algunas explicaciones.
EXPLICACIONES SEGÚN LAS EDADES
La mayoría de los expertos coinciden en que los padres no debemos preocuparnos por tener relaciones sexuales cerca de nuestro bebé. Los bebés no pueden procesar lo que los padres están haciendo, por lo que no tiene ningún significado para ellos.
En el caso de los niños pequeños, mientras algunos pueden ser ajenos a las relaciones sexuales y no sorprenderse o sentir curiosidad, otros pueden necesitar que los tranquilicemos, porque su primera reacción es pensar que algo violento y aterrador está sucediendo. En este caso, explícale que tú y tu pareja estaban teniendo un momento privado y que no se estaban haciendo daño, y déjalo en eso a menos que haga más preguntas.
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Los niños en edad escolar suelen tener cierta curiosidad sobre el sexo, pero al mismo tiempo, por lo general quieren alejarse del tema. A esta edad lo mejor es seguirle la corriente y explicarle hasta donde lo puedan manejar. Si ves que se pone muy incómodo con la charla del sexo, déjala para más tarde.
Por otro lado, los pre-adolescentes ya suelen saber lo que está pasando y pueden incluso hacer ruidos fuertes de disgusto si te encuentran accidentalmente haciendo el amor. Sin embargo, es un buen momento para explicarle la idea de que el sexo es una agradable actividad privada que tiene lugar en las relaciones adultas.
Por último, los adolescentes pueden manejar mejor la idea de que sus padres son seres sexuales. Suelen ser los que menos problemas se hacen y hasta pueden tomarlo a broma si te sorprenden haciendo el amor. Sin embargo, trata de que esto no suceda con demasiada frecuencia, porque la situación puede crear malestar y ansiedad.
QUE PUEDES HACER DESPUÉS DEL INCIDENTE
Independientemente de cómo decidas hablar de la situación con tu hijo, la mejor actitud es la de es mantener un perfil bajo no emocional, tratar de evaluar cuáles son las preguntas para las que tu hijo quiere respuesta, y darle información apropiada y positiva acerca del sexo.
Y para la próxima vez, toma algunas medidas para prevenir la situación: instala una cerradura en la puerta del dormitorio, enséñale a los niños a golpear la puerta antes de entrar, pon música suave o enciende la TV para disimular los ruidos, y programa "momentos privados" en los que tu hijo sabe que no debe molestarlos.